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jueves, 22 de diciembre de 2022

MI VECINO FINAL



Para leer la parte 3 haga clic aquí Parte 3 


El tratamiento:

 



Me senté en la silla enfrente del escritorio, en ese consultorio blanco con la camilla, además de estar en urgencias de un hospital bastante concurrido, con todos los instrumentos médicos y los gabinetes lleno de medicamentos, además con la actitud de Nicolás completamente inmerso en su papel, para mi había sido una revisión médica real, y no lo esperaba de esta manera. Me sentía muy nerviosa, estaba algo asustada, pero también feliz porque finalmente la cita si se había dado, . Estaba pensando en todo esto, estaba en otro planeta asimilando todo lo que había pasado, me saco de mis pensamientos y me trajo de vuelta a la tierra cuando empezó a hablar, y me dijo:

Después del chequeo veo que usted está muy débil, tiene anemia, esta supremamente tensa tiene todos los músculos completamente encogidos demasiados nudos, tiene gastritis a punto de darle ulcera porque no come a sus horas, además que su estómago este inflamado y siente dolor, síntoma de una dieta no balanceada y demasiadas preocupaciones etc., etc., etc. Solo pensaba ya dame la receta… y no me regañes más... siguió unos diez minutos más, diciéndome los resultados de la sesión, hizo una pausa y me miro, bueno para todo lo que tiene aquí esta lo que vamos hacer.

Primero, a comer frutas, verduras, pescado e hígado para la anemia, bajarle a las harinas etc., etc., etc., a sus horas sin perder ninguna además de unas meriendas entre una y otra.. A lo que yo inmediatamente conteste no me gusta el pescado, ni nada que venga del mar, ni el hígado tampoco nunca he podido y me dijo ah no le gusta el pescado ni el hígado ya muchas cosas tienen sentido, sigamos con las indicaciones, hacer ejercicio, salir a sus horas y bajarle al stress… y te vas a tomar unas pastillas de xxxx en ayunas para la gastritis y me extendió la receta  inmediatamente sonreí, y me levante de la silla pensando que había terminado.., cuando me dijo a donde va, no hemos terminado. Esa es la primera parte las recomendaciones ahora:

Señorita como a usted no le gusta el hígado ni el pescado, bueno pues lo que no entra por la boca… entra por otra parte así que le voy a recetar 3 ampolletitas de hierro, una cada tercer día… y  10 ampolletas de vitamina B12 una diaria.

Además, le voy a recetar un relajante muscular inyectable y después un buen masaje para tratar de deshacer los nudos. Me puse muy pálida, pensé que lo decía solo para asustarme y darle más vida al juego, pero su seriedad me tenía muy confundida.

Le voy a recetar un enema, para los problemas del colon y el estómago que tiene en este momento … en ese momento abrí mis ojos y le pregunté ¿un enema? Me dijo si claro, es lo mejor que va para el desorden que tiene en este instante…

Me entrego las dos recetas, me levante y salí al pasillo creo que iba flotando y todavía no aterrizaba, salí y emprendí mi regreso al apartamento.

Ya en la noche golpearon en la puerta y era Nicolás, venia invitarme a cenar como lo habíamos programado y me pregunto te gusto la sesión linda?. Le dije si me gusto, pero no lo esperaba me lleve una sorpresa muy grande, se empezó a reír y me dijo lo sé pero quería que fuera así, en mi apto era algo más irreal y quería que lo sintieras de verdad… suspire y le conteste ah bueno ósea que las recetas son de mentiras también, verdad? No, no, no preciosa es muy real y si vas a seguir el tratamiento, yo mismo me encargo de eso, que lo sigas al pie de la letra a lo que proteste , pero ¿14 inyecciones y un enema?. Es mucho, para un juego, no por favor y solo me contesto, lo siento, pero si las necesitas en realidad, quien te manda a ser tan caprichosa con la comida, y llevar el estilo de vida que llevas, no te atormentes más con eso, mañana empezamos OK, por ahora vamos a cenar.

Llego el domingo desperté entre nerviosa y asustada, no hacia sino pensar en la receta hasta que golpearon en la puerta y era el, me dijo vamos a comprar los medicamentos, yo te acompaño fuimos a las farmacia, y cuando nos entregaron todas las ampollas, las jeringas, el enema empecé a temblar, salimos con todo de vuelta al apartamento iba callada en silencio, y solo atine a preguntar me vas a inyectar 2 hoy?.

Si Curiosita, es mejor que empieces ya, con eso terminas más rápido, sé que duelen un poquitín, pero es por tu bien, si comieras mejor te hubieras evitado el hierro, así que no hay nada más que hablar, cuando llegamos a mi apartamento me dijo vamos a tu habitación y ya con eso te quitas ese peso por hoy.

Acuéstate bocabajo y ya sabes bájate el pantalón, y la ropa interior déjame ver toda la colita. Lo hice mientras el preparaba ambas ampollas, se acercó acaricio mi espalda y una de mis nalgas, froto con algodón y empecé a tensar y apretar el glúteo, solo me dijo no, no hagas eso te va a doler más, pero es que no quiero replique yo, y sin más me dio dos nalgadas fuertes y me dijo te quiero flojita y cooperando, y procedió a clavar la aguja, cuando inyectaba me dolía y me ardía, ya casi acabamos tranquila bonita relájate y respira profundo. Termino e hizo presión sobre el piquete, para esparcir el medicamento, me dolía… inmediatamente empezó a frotar el algodón en la otra nalga y yo le decía espera, espera todavía no, shhhhh tranquila preciosa, relájate, y es mejor hacerlo de una vez para terminar con las inyecciones de hoy, porque o si no tendré que darte unas palmadas para que te dejes, a continuación me dio 2 palmadas fuertecitas y clavo la aguja, quiero que te quedes muy quieta OK esta inyección hay que saberla aplicar o si no te dejara marca, y empezó a introducir el medicamento, me dolía muchísimo y no pude evitar al principio sollozar y después llorar, sácala, por favor te lo ruego, tranquilita,  ya casito acabamos… y siguió inyectando a pesar de mis ruegos hasta que termino.

Me subió la ropa me dijo ya paso, seco mis lágrimas y me dijo sabes esta noche te aplicare el enema antes de que te acuestes a dormir… me dio un beso en la frente y me sugirió que durmiera un poco para descansar y relajarme para que estuviera lista en la noche.

FIN


miércoles, 21 de diciembre de 2022

Relato Navideño

 



Daniel y Noelia vivían en un país en el cual era inmigrantes. Noelia había sido trasladada y promovida en su trabajo y Daniel había llegado buscando una nueva vida. Su interés mutuo los llevo a una página de internet donde personas de diferentes nacionalidades intercambiaban experiencias, relatos sobre un gusto en común.

Ellos acordaron en intercambiar regalos y pasar el día de navidad juntos compartiendo tradiciones culturales y familiares.

Noelia quería hacerle un regalo especial a Daniel, algo que el realmente pudiera disfrutar sin sentirse culpable o comprometido de alguna manera. El recientemente se había quejado de que su celular había quedado obsoleto, y no actualizaba las diferentes aplicaciones que eran lo que tenían conectado con su familia. Ella decidió indagar y parecía muy motivado por comprar un celular de gama media, que además se veía muy bien, pero no tenía todo el dinero ahorrado y no quería endeudarse demás así que ese sería el regalo para él, algo que el usaría, y que disfrutaría.

Por su lado, Daniel no sabía que regalarle a alguien que en teoría lo tenía todo, su presupuesto era muy limitado, y lamentablemente el esperaba una especie de aguinaldo que nunca llego, por lo tanto, su presupuesto era muy ajustado, se devanaba la cabeza pensando en que le regalaría, y que ella realmente le gustara, sabía que Noelia era muy diplomática, y nunca despreciaría un regalo delante de él, y que siendo ella quien era, le tendría una super sorpresa, tenía claro que por las fiestas todo estaba más costoso, pensó en escribirle un poema, pero desistió, él no era escritor o poeta, tal vez hacer algo, fabricarlo con sus manos, pero no le daba el tiempo y todavía era nivel principiante para regalar algo adecuado.

Noelia, estaba enamorada profundamente de Daniel, era lo que ella buscaba, un hombre trabajador que la respetara, que la amara, pero lo mas importante que entendiera y compartieran las mismas locuras, al mismo tiempo ella no era indiferente a las inseguridades de Daniel.

Era nochebuena hacia frio y era tarde. Daniel estaba estresado, ansioso y bajoneado porque no quería llegar con las manos vacías, y se lamentaba de su situación económica, inmerso en sus pensamientos hasta que un mensaje de texto de Noelia lo saco de sus pensamientos preguntándole que le gustaría cenar. Daniel empezó a leer todas las conversaciones que había sostenido con Noelia desde que intercambiaron números de teléfono, y en un momento tuvo una idea, era arriesgada, pero decidió hacerle caso a su instinto y ya tarde en la noche, rezo porque donde necesitaba ir todavía estuviera abierto, y la fortuna le sonrió, porque estaban a punto de cerrar cuando el entro y compro lo que necesitaba.

Puso sus compras en una pequeña bolsa de navidad que reciclo del año pasado, y se encamino hacia casa de Noelia con su regalo, antes escribió un papelito a manera de tarjeta. Luego de cenar, y conversar, el reloj indico la media noche con sus campanadas a lo lejos, se abrazaron, se besaron y se felicitaron mutuamente.

El intercambio de regalos era lo siguiente se sentaron en frente de la chimenea y mirándose a los ojos Noelia le entrego el regalo a Daniel quien lo abrió con precaución, cuando se dio cuenta que era el celular que él quería una sonrisa se dibujó, sus ojos brillaron, pero luego de segundos se apagaron, se sintió culpable, sus miedos e inseguridades se apoderaron de él, ¿qué le podía  ofrecer a Noelia?, cuando su regalo no le había costado mas que un par de dólares.

Noelia estaba ansiosa por recibir su regalo, como niña pequeña no podía dejar de mirar la pequeña bolsa navideña, y Daniel le pidió que mejor le diera un tiempo para darle un regalo mejor. Noelia no acepto, y le rogo que le diera su regalo, porque el intercambio se trataba de regalar algo que la otra persona pudiera disfrutar y gustar, por eso le regalo el celular, no por un tema económico.

Tanta fue su insistencia que Daniel acepto y le entrego el regalo, Al abrir la bolsita los ojos de Noelia se abrieron como platos, brillaban como estrellas en el firmamento y una sonrisa que transmitía felicidad, picardía, deseo y más.

Leyó la nota que decía: “Mi amor, vos sabes que no tengo mucho dinero ahora, pero lo que nos permitió encontrarnos en un mundo de gente es este interés, gusto mutuo que quiero siempre compartir contigo. No necesitamos de roles, o de juegos para disfrutarlo. Te amo”.




 después de leer la notita con sus ojos algo húmedos por lagrimas que se contenían en sus ojos, Noelia saco una jeringa de 5 cm con una bolsita de agua bidestilada. Al mismo tiempo Daniel buscaba algodón y alcohol.

Cuando todo estuvo preparado, en frente de la chimenea, con el crepitar y calor del fuego, Noelia se acostó bocabajo, bajo su pantalón dejando a la vista sus pompas cubiertas con ropa interior color rosa, y con su vista fijada en las manos de Daniel como picaba la bolsita y empezaba a llenar la jeringa 1 cm, 2 cm, 3 cm, 4 cm, 5 cm. Cuando estuvo llena, cambio la aguja, apunto al cielo y una gotita se asomó por el ojo de la aguja. Tapo la aguja con la tapita y la dejo aun lado

Lentamente sin ningún apuro, Daniel lentamente empezó a desnudar las pompas de Noelia, sus dedos rozaban delicadamente la piel, admiraba lo que tenia en frente, y disfrutaba cada segundo, Noelia disfrutaba de sentirse vulnerable, entregada, empezaba a entrar en un trance donde solo quería complacer a Daniel, sus dedos tocando su piel mandaban impulsos eléctricos. Daniel bajo toda la ropa interior hasta la base de los muslos, dejando la cola lista para ser pinchada, se agacho le dio un beso, y procedió a limpiar con algodón de manera circular, y al oído le pregunto. ¿Estas lista? Ella casi con un suspiro le dijo si, Daniel pico, y le dijo empiezo a inocular. Inmediatamente Noelia pudo sentir como cada centímetro dolía, se quejaba, y Daniel solo la consolaba asegurándole que ya era menos, que la amaba, Noelia disfrutaba y padecía el mismo tiempo, para la mitad imploro que por favor parara, y Daniel le dijo que lo haría de manera temporal, y le pidió que se dejara inyectar los 5 cm completos, mientras le daba un tierno beso en los labios, y posteriormente en la otra pompa. Noelia se rindió y dijo si, con lo cual Daniel procedió a pinchar e inyectar como en la primera pompa, y despues de terminar la inyección, sobo. Masajeo las pompas de Noelia, y en frente de la chimenea Daniel y Noelia dieron rienda suelta a sus deseos.

colorín Colorado este cuento se ha acabado.

sábado, 2 de julio de 2022

MI VECINO PARTE 3


Para leer la Parte 2 haz click aqui Parte 2

La Consulta




El nombre de mi gentil vecino es Nicolás, y después de la velada, agendamos una sesión, para la siguiente semana, el sábado, en su apartamento a las 4:30 p.m. y después en la noche iríamos a cenar.

Durante la semana no nos cruzamos, nuestros horarios no coincidían y yo estaba muy ansiosa porque llegara el día propuesto. Finalmente llego el día sábado, y decidí ir a un spa cercano a mi apartamento para un buen masaje relajante, estaba muy tensionada y quería estar relajada, de buen humor para tan especial sesión, primero porque toda la semana además de los nervios y ansiedad por tan importante cita médica, la semana a nivel laboral había sido infernal con mucho stress.

Hacia las 3:20 p.m., recibí una llamada al celular era Nicolás para avisarme que no podía asistir a nuestra cita algo urgente se había presentado en el hospital, que lo lamentaba pero era algo que se le salía de las manos, me decepcione muchísimo, anhelaba esta sesión pero entendía que los compromisos laborales son primero, y además para pedirme un favor muy grande, que le llevara urgente su portátil que tenía una información de un paciente al que tenía que atender de manera inmediata, que la copia de la llave de su apartamento estaba en x lugar, y que el equipo estaba encima de la mesa del comedor, le pregunte si se lo podía enviar por email ya no tenía ganas de salir, estaba algo deprimida, pero insistió diciéndome que era más rápido que yo se lo llevara personalmente para no perder tiempo en claves, ubicación de archivo etc., que su trabajo dependía de ello, tanto rogó que le dije OK ya busco el aparatejo y salgo para allá con algo de enojo y decepción en mi voz.

Tenía el tiempo justo para salir, el tráfico los sábados es insoportable, así que cuando hice lo que me pidió, conduci al hospital, llegué a las 4:25 p.m. supremamente estresada, de mal genio y con dolor de cabeza (el masaje relajante de la tarde se había ido al drenaje) porque pensaba en lo impaciente y enojado que estaría Nicolás de ver que yo no llegaba. Cuando llegue a urgencias lo solicite, me preguntaron quien lo busca les dije mi nombre y me dijeron a él la está esperando en su consultorio siga por el pasillo y en el fondo lo encontrara.

Camine rápido, encontré el consultorio, el salió a recibirme con una sonrisa y me dijo Usted es Curiosa ¿verdad?, Ha llegado muy puntual a su cita médica, por favor siga y siéntese … me quede de una pieza estaba perpleja, desconcertada, asombrada, no podía hablar, me llevo hasta la silla y cerró la puerta del consultorio.

Empezó a preguntarme por mi historial médico, mis antecedentes familiares, hacia cuanto no me hacia un chequeo médico por prevención Etc., cuando estaba saliendo de mi asombro le reclame diciendo ¿sabes el dolor de cabeza que tengo, por esta broma tuya? A lo que me contesto muy serio y sin mirarme, por favor contésteme lo que le estoy preguntado para llenar su historia clínica. Me dejo desarmada y empecé a contestar todo lo que me preguntaba. Al final me dijo bueno por favor quítese toda la ropa, déjese la ropa interior y póngase esta bata que la revisare de pies a cabeza. Al escuchar estas palabras, un corrientazo eléctrico recorrió mi columna, además porque tomo su rol muy en serio.

Cuando me cambie, me pidió que me sentara en la camilla y la revisión comenzó, me tomo la tensión, me tomo el pulso, empezó a auscultarme con el estetoscopio el pecho, la espalda, los ojos, los oídos, la garganta, bajo la bata y empezó a revisar mi espalda, recorriendo con su mano cada una de las vértebras, después me pidió que me acostara palpo mi vientre me pregunto si dolía, siguió con su revisión sin dejar ninguna parte del cuerpo por examinar.

 

Dese la vuelta debo hacer un tacto rectal, relajase por favor, inmediatamente lo voltee a mirar con estos lindos ojos ya que esto me tomo completamente por sorpresa, solo me miro y me dijo muy suave y con una amplia sonrisa yo le dije que la revisaría de pies a cabeza… y esto está en el medio.. me levanto la bata, bajo mi ropa interior hasta la mitad de mis muslos, se puso un guante de látex en su mano derecha, lubrico su dedo con vaselina y con la mano izquierda separo mis nalgas, y de manera muy suave empezó a introducir su dedo en mi ano, estaba muy tensa, y solo me decía relájese que esto no duele, inhale muy profundo… finalmente logre relajarme, después de un minuto termino con el tacto, acto seguido me dijo debo tomar su temperatura y aunque ya lo preveía no deje de sentir algo de nervios, nuevamente separo las nalgas, y metió el termómetro estaba frío, cosa que me erizo la piel.

 

Mientras tenía ese palito en el trasero, me pregunto, ¿aun le duele la cabeza? Si me duele bastante, esa broma tuya, y me interrumpió, vamos a ver como esta su temperatura porque este examen lo perdió y le toca repetir el año, se retiró escuche como buscaba algo dentro del gabinete y un papel rompiéndose… en esas se volvió acercar a mi y saco el termómetro, me dijo tiene unas décimas de fiebre, no es mucho, le voy a colocar un supositorio para el dolor de cabeza que tiene. Lo mire realmente angustiada y le dije que eso no!! , mejor una aspirina, a lo cual me respondió con un tono de voz muy autoritario, YO soy el médico, YO decido, ademas no es lo mejor que le va con esa gastritis que tiene, asi que no proteste o debere tomar otras medidas, coloquese bocabajo y levante un poco la cadera, y como no tenia salida hice lo que me pedia; realmente me sentia muy avergonzada, pero lo estaba disfrutando al maximo, a continuación separo las nalgas y me pidió que respirara profundo, al hacerlo empezó a introducir el supositorio, muy lentamente hasta que lo metió hasta el fondo, y lo acompaño con su dedo para que no se saliera, me dijo este medicamento es bendito ya vera que le pasa el dolor de cabeza en un santiamén. Al finalizar de ponerme el supositorio con mucho cariño y paciencia, me dijo bueno debo hacer un examen pélvico y de pechos para terminar con esta revisión, por favor termine de desvestirme, levanto los estribos de la camilla y me examino como buen médico que es .

Cuando termino, me ayudo a bajar de la camilla me pidió que me vistiera y me dijo tenemos que hablar muy seriamente del estricto tratamiento a seguir.

Continuará…

 


lunes, 20 de junio de 2022

MI VECINO PARTE 2


Para leer el principio de esta historia: Haz click aqui  Parte 1



Después de que mi buen vecino me diagnóstico y me inyecto; estuvo muy pendiente de mi hasta que estuve completamente restablecida. Cada vez que me veía llegar tarde me decía: ¿no querrá que la inyecte de nuevo verdad, Srta.?, yo solo sonreía con cierta picardía y le decía mientras no sea el antibiótico que tanto le gusta recetar Doctor me arriesgare.

Una tarde llegaba yo a casa, y como tenía pico y placa ese día no tenía el carro, llegaba a pie por la entrada de la calle del edificio y vi a Nicolás en la recepción de este, se despedía de una chica que disimuladamente se masajeaba el trasero e inmediatamente pensé pobre la acaba de inyectar, en fin, la chica se despidió y salió, en la cara y en su caminar se le veía que estaba muy adolorida, así que me acerque y lo salude.

¡¡Hola Doc!!

¡¡Hola Curiosa!! ¿Estas enferma? llegaste temprano ¿Necesitas que te inyecte?

No para nada, yo me encuentro muy bien gracias a tus cuidados. En seguida pregunte, ¿esa chica que acaba de salir es paciente tuya?

Si, bueno no, es la sobrina de un profesor de la U, que le mandaron inyectar un Benzetacil por una afección en la garganta, ¿te es familiar? y como no tenía quien la inyectara me pidió el favor a mí, ¿Cómo lo sabes?

Ah bueno vi que se estaba masajeando la cola y por la cara que llevaba además como caminaba veo que le dolió mucho, y tú que dices que tienes buena mano jejeje

Tienes alguna queja ¿curiosita?

No, no yo ninguna para nada

Claro que le dolió ese medicamento es muy fuerte, además no se quedaba quieta y me toco darle un par de nalgadas fuertes para que no se moviera, no falto nada y casi rompe la aguja y por poco se cristaliza el medicamento, no tuve más remedio 

Sabes te veo un poco pálida, segura no necesitas una revisión. Estoy seguro necesitas una inyección tal vez una vitaminita... Un complejito B te caería de perlas…

No, no, no… yo me siento divinamente y no quiero molestarte, pero aprovecho para invitarte a tomarte un té, sé que no tomas café para agradecer tus atenciones conmigo, hoy me acorde que no te pague los medicamentos que me hiciste el favor de pagar tú, ese día estaba tan adolorida pase por grosera y aprovechada, así que por favor acepta mi invitación además te devuelvo el dinero que lo tengo en el apto.

Claro que acepto la invitación de mi valiente paciente, y por el dinero no te preocupes, que sé que estabas en otro mundo ese día.

Continuamos con la charla informal y subimos al apto, me dijo sabes no quiero té, ¿no tienes vino? Si, si tengo este me lo regalaron recientemente y me dijeron que es muy bueno. Lo miro y asintió con la cabeza, lo abrimos y lo servimos en dos copas, hablamos de todo y llego un momento en que me miro a los ojos y me dijo sabes, me encanta todo el tema medical, realmente me apasiona, creo que en parte por eso decidí estudiar medicina, me encanta ver a las pacientes nerviosas, como se bajan la ropa etc. este tema es realmente fascinante para mí. Lo mire como diciendo ¿por qué me cuentas esto a mí?  Interpreto muy bien mi mirada y respondió, sé que a ti te gusta también, a pesar de que estabas asustada y muy nerviosa pude ver que te estaba causando mucho placer, dime estoy equivocado o ¿no? Me quedé muda, y por los efectos del vino respondí, no estas equivocado.

 

Con una amplia sonrisa me dijo, lo sabía, encontré una compañera de juegos y ante esto no pude evitar soltar una sonora carcajada y le dije ¿ah sí? A lo que él me dijo mírame a los ojos y dime que no quieres jugar y jamás volveré a tocar el tema. Lo mire a los ojos, me perdí en ese océano y casi inaudible le conteste SI, quiero jugar.

 

Mi vecinito estaba feliz, no lo podía disimular, me dijo todo lo que le gustaba hacer, aunque me aclaro que a la hora de trabajar era muy serio y comprometido con la causa aunque aprovechaba ciertas situaciones como se dio en mi caso, para aprovechar al máximo, seguimos hablando durante mucho tiempo de lo que nos gustaba sobre estos temas y ya terminando la velada me dijo quiero que cerremos con broche de oro esta velada, te pondré una inyección, te aplicare el complejo B que sé que necesitas y ya veremos qué haremos en los próximos juegos.

Estaba asombrada ante la petición de mi querido vecino, estaba muy emocionada pero también nerviosa y asustada, porque he leído de lo mucho que duele, le pregunte, ¿no podemos empezar con suero? Que sea algo suavecito, y ante esta inusual petición no pudo evitar reírse y solo contesto, ¡¡no seas cobarde!! Estoy seguro de que lo disfrutaras mucho.

Me tomo de la mano y me dijo subamos a mi apartamento que allá tengo todo lo necesario. Cuando llegamos entro a su habitación y regreso con el maletín, se sentó en el sofá y delante mío empezó a preparar la ampolla y como ese liquido rojo llenaba la jeringa además del olor característico a vitamina, cuando termino de prepararla me dijo bájate los pantalones y colócate sobre mis rodillas y como zombi solo obedecí, el bajo mi ropa interior para dejar descubiertas completamente las pompas, froto el algodón impregnado de alcohol en la pompa derecha, procedió con sus características palmaditas y clavo la aguja, después empezó a inocular y vaya que sentía dolor, pero a la vez sentía muchísimo placer. El solo me decía shhh tranquila, relájate y disfruta linda.

Finalmente termino, me sobo la nalga, subio la ropa interior y me dijo ya te puedes levantar ha sido un placer inyectarte mi querida paciente, me levante, me subí los pantalones le di le di las gracias y un besito en la mejilla, por tan especial velada y enseguida agendamos otra sesión donde habría algo más que inyecciones.

Continuará

Para ver la continuacion haz clicl aqui :Parte 3

martes, 24 de mayo de 2022

MI VECINO

 

Este relato es muy especial para mí, fue el primero que escribí por allá en el 2011 y su primera publicación fue en un foro que se llamaba Bajate los Pantalones BLP, bajo el pseudónimo de Curiosa. Este relato tiene una continuación con dos partes más, pero no estoy segura de publicarlos. Déjenme saber en los comentarios si les interesa leer un poco más de esta historia. 





Todo comenzó una noche al llegar a mi apartamento después de un día muy extenuante en la oficina, era la época de elaboración de presupuesto para el siguiente año, esto hacía que las jornadas de trabajo fueran muy largas y extenuantes, llegaba alrededor de la medianoche a casa, después de haber parqueado el carro me dirigí hacia el ascensor y vi que las puertas se estaban cerrando entonces alcance a ver una persona dentro de él y grite  por favor espere, esta persona sostuvo la puerta del ascensor y cuando llegue me di cuenta que la persona que había visto era un médico por el  uniforme, además por el logo que tenía en este, supe que era médico de urgencias del hospital universitario (reconocí el logo, en esa universidad había estudiado yo).  Solo le dije buenas noches y gracias a lo que él me contesto con una sonrisa y añadió son Buenos días, ya son las 12:10 a.m. me sonreí y dije si tienes razón.

Me bajé en mi piso y él continuo en el ascensor, y pensé no sabía que teníamos médico en el edificio, me reía sola, porque mi imaginación empezó a revolotear con lo que esto significaba y mi particular gusto sobre ciertos temas.

Varios días continuaron así, nos encontrábamos más o menos a la misma hora unos minutos más temprano y otros más tarde charlábamos en el ascensor y me entere que vivía exactamente un piso más arriba, que llevaba varios años como jefe de urgencias del hospital universitario y así nos fuimos haciendo amigos siempre bromeábamos sobre la universidad, los vecinos y de nuestros trabajos yo le decía mis errores se pueden corregir, reversar, ajustar los tuyos son más complicados de solucionar.

Debido a las extenuantes jornadas, el stress del trabajo, una dieta no muy balanceada, los cambios de clima y las pocas horas de sueño, empecé a debilitarme, me sentía mal, completamente desganada, y supremamente agotada, hasta que un buen día amanecí completamente disfonía, tenía tos, malestar general y un poco de fiebre pero no le di mucha importancia y así me fui a trabajar dure dos días en este estado sin seguir dándole importancia, además hacia como 4 días no me cruzaba con el doc., hasta esa noche, cuando me encontré con él.

Al saludarme, intente hablar pero ni un poquito de voz salió, así que solo sonreí y lo salude con la mano, el muy serio me pregunto ¿hace cuanto estas así? y con señas le indique que 2 días, a lo que contesto, ¿ya te vio un médico?, menee la cabeza indicándole que no, inútilmente trataba de hablar pero nada salía, para decirle que no se preocupara, que yo me sentía bien, el como si me hubiera leído mi pensamiento me dijo, eso que tienes puede ser muy serio, toco mi frente y estaba algo caliente, me dijo con cierto tono de enfado en su voz, tomate una aspirina y mañana a primera hora bajo a tu apartamento y te reviso, NO puedes ir a trabajar.

Esto me dejo muy nerviosa, ansiosa, etc. además con insomnio con el tema de la revisión y consulta de tan especial Doctor.

Muy a las 7 a.m. tocaron el timbre yo ya estaba despierta y arreglada, tenía toda la intención de irme a trabajar, no quería quedarme en casa de pensar, primero que estaría sola todo el día y segundo pues todo el trabajo que se acumularía a mi regreso, cuando abrí la puerta era el, con un maletín en la mano, pero sin su uniforme, pero si con una bata blanca a penas me vio me dijo no pensaras ir a trabajar ¿o sí? Estas incapacitada, no te preocupes yo te hago la certificación por enfermedad, me pregunto como seguía, y yo todavía sin ningún atisbo de voz le indicaba con señas que estaba bien e inmediatamente le ofrecí una taza de café recién preparado me dijo gracias pero no tomo café, además tu deberías estar en cama esperando a que yo te revise, este comentario me puso muy nerviosa entre otras cosas, a continuación, me dijo quiero que te cambies y te pongas algo cómodo, préstame por favor tu celular que mientras tú te cambias yo le mandó un mensaje de texto a tu jefe diciéndole que no vas a ir a trabajar que estas en licencia de enfermedad por orden médica y que vía correo electrónico le envías copia de la incapacidad.

Al ver lo serio que estaba solo obedecí, me cambie a la velocidad de la luz y justamente cuando termine de hacerlo él entro en mi habitación y el examen y revisión comenzó, me tomo la presión, escucho los latidos de mi corazón, reviso mi respiración, examino mi garganta, mis oídos etc., etc., cuando pensé que había terminado con la revisión me dijo ahí se me olvidaba debo tomar tu temperatura, que anoche estabas con fiebre, esbozo una sonrisa, me mostró el termómetro y yo abrí mi boca, el solo me dijo con una amplia sonrisa no por ahí no es por favor date la vuelta curiosita que este termómetro ira en tu trasero; al oír esto mis ojos se abrieron por completo enrojecí de inmediato, y pronto me puse muy pálida. Entré en una especie de trance de todo lo que sentía, los nervios, la ansiedad, el morbo todo en un instante, el solo me decía tranquila es el método más fiable y preciso de todos, será un momentito nada más… anda ponte bocabajo, finalmente accedí baje el pantalón de mi pijama y después mi ropa interior dejando completamente descubiertas mis nalgas, introdujo el termómetro lo dejo unos minutos y al cabo de este tiempo miro y me dijo.. Umm esto no me gusta tienes fiebre, ya te puedes vestir.

Ya terminada la revisión con voz enfadada me decía: Es el colmo “Curiosa” tienes la laringe completamente inflamada además uno de tus pulmones está muy comprometido tienes una infección en los bronquios muy fea y tu como si nada no le das importancia y te vas a trabajar, bla, bla, bla.

Después de tan largo argumento y regaño saco su recetario y me dijo: Mi querida curiosa he de recetarte de manera inmediata y urgente 2 medicamentos ambos son inyectables  IM y deben ser administrados hoy así que yo mismo te los aplicare como buen vecino que soy, considérate con suerte mujer porque  hoy es mi día de descanso, y no es por alardear pero me han dicho que tengo muy buena mano jejeje y aunque mis errores son más complicados de solucionar a veces tienen ciertas ventajas que el tuyo no ofrece.  Me hizo un guiño bastante coqueto. Yo solo seguía inmóvil en un trance y completa incredulidad de todo lo que algún día pensé, se estaba haciendo realidad.

Préstame el teléfono linda y ya llamo a la farmacia para que me traigan a domicilio los medicamentos, asentí con la cabeza y empezó a marcar luego escuche su conversación con el farmaceuta creo yo y le dijo si necesito una ampolleta de este medicamento y un antibiótico de 2.400 unidades, si por favor y las respectivas jeringas, no, no se preocupe que yo seré quien las inyecte al escuchar las palabras antibiótico solo quise gritar, pero no podía, mis ojos imploraron misericordia y mi rostro solo denotaba angustia. Al verme en un estado de nervios total, solo sonrió y me dijo, tranquilízate preciosa, tienes que relajarte o sino te dolerá una barbaridad. Ya verás que en un momento pasa todo esto, trata de relajarte ¿bueno? Además, sí que eres afortunada seré yo quien te pique las pompitas, y te las pondré con mucho cariño.

A pesar de que trataba de tranquilizarme no podía lograrlo a medida que pasaba el tiempo solo estaba más nerviosa y otras sensaciones de por medio, me pregunto donde guardaba el alcohol y el algodón y le indique a través de señas donde estaban guardadas, las encontró y las puso encima de la mesa de noche justo al lado de la cama.

Pasaron 10 eternos minutos y sonó el citófono, mi corazón se aceleró, pensé llego el de la farmacia, llego el momento de la verdad, el atendió la llamada sí que suba, finalmente llego el mensajero recibió los medicamentos, pago y lo despidió.

Entro nuevamente a mi habitación  y me dijo empezare con la ampolla del medicamento que había solicitado y comenzó a preparar la inyección enfrente mío, vi como rompía el cuello de la ampolla y llenaba la jeringa con aquel liquido los respectivos golpecitos en la jeringa hasta que una gota salio de la aguja y me dijo bueno princesa ya la primera esta lista, prepárate para tus dos inyecciones así que ponte bocabajo y bájate los pantalones de la pijamita, lo mire a los ojos tratando de ganar un poco más de tiempo pero solo me dijo “al mal paso darle prisa”.

No me quedo otra sino hacer lo que me indicaba, él se acercó a mí, se sentó en la cama y con toda la calma del mundo bajo mi ropa interior dejando al descubierto por completo las nalguitas, al oído me pregunto donde quieres que te la ponga y con la mano le señale la derecha acto seguido escondí mi cabeza entre los brazos, y comenzó el ritual empezó a frotar el algodón sobre mi piel, dio 4 golpecitos fuertes y rápidos e inmediatamente clavo la aguja, no sentí el pinchazo, me dijo ya tienes la aguja ahora empezare a inyectar el medicamento ponte flojita por favor, al decir esto empezó a inocular de manera lenta me ardía y dolía, pero pensaba que esto no era nada con lo que seguía después, el solo me decía shhhhhh tranquila ya casi acabamos falta muy poco, finalmente saco la aguja y masajeo con el algodón.

Ahora mientras esperamos 3 minutitos, voy a prepararla la otra y tratando de aliviar la tensión jocosamente me dijo no te vayas a ir. No me hizo ninguna gracia este chascarrillo y no tenía como hacérselo saber.

Me quede inmóvil bocabajo con las nalgas desnudas tratando de sobrellevar el dolor mientras el preparaba la segunda inyección, temblaba de nervios, placer, y sobre todo estaba muy ansiosa porque yo se cuan dolorosa es, de reojo veía como introducía la aguja en el frasquito con agua para la inyección hasta que llenaba la jeringa, después como introducía esta agua en el frasquito de polvitos blancos y  mezclaba los polvitos con el agua, enseguida como agitaba el frasquito, con mucha agilidad y precisión, en ese momento ya no quise mirar más y enterré mi cabeza en la almohada, sentí como se me acerco, paso una mano por mi espalda y me dijo quiero que trates de estar muy relajada, no tensiones ni aprietes el músculo ¿OK?, bonita.

Nuevamente paso el algodón en la pompa izquierda y la froto con movimientos circulares, los mismos golpecitos de antes y clavo la aguja muy rápida y como la anterior no la sentí, volvió a decirme la aguja ya está adentro, deberé inyectarte un poco más rápido porque o sino se cristalizara y será peor y en ese instante empezó a inyectar tan viscoso y denso medicamento cada vez me ardía más y más, quería gritar pero mi voz no respondía, el dolor era insoportable trataba de no moverme y estar relajada pero me costaba mucho trabajo, al mismo tiempo el solo me decía con voz cariñosa al oído, tranquilízate, relájate ya casi terminamos linda, cuenta mentalmente hasta 10 yo solo me quejaba en silencio y lágrimas caían sobre mis mejillas por tan horrible dolor que se extendía por toda mi pierna, finalmente termino, retiro la aguja y empezó a masajearme con el algodoncito, hemos terminado hermosa.

Me subió la ropa, seco mis lágrimas y al mismo tiempo en un tono paternal me decía ves lo que te pasa Curiosita por descuidarte y andar solamente trabajando y pensando en presupuestos que ni siquiera son tuyos, pero no te preocupes que yo te cuidare y te inyectare cuantas veces sea necesario, ¡¡para eso somos VECINOS!!

Y ese fue el comienzo de una muy interesante amistad.

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Antes que nada, quiero disculparme por tener este blog un poco abandonado, tanto que en las entradas más populares han hecho comentarios tipo SPAM que si los he eliminado. El tiempo ha pasado y muchas cosas en el medio también, mi vida parece una montaña rusa y a veces un poco descontrolada, temas que no son motivo de este post.

Aun asi, he decidido activar un poco mas este blog, escribir relatos para no perder la costumbre mientras que me de el tiempo, porque volví a estudiar, y con trabajo porque no agregar una cosa más a mi plato jajaja. Para los Spankers que me leen. Si merezco un buen correctivo.

Gracias por leerme.