UN CAPRICHO DEL DESTINO ..3 (RELATO)

PARTE 3

Previamente en Un capricho del Destino: Mi Spanker me castigo fuertemente dándome 100 azotes con diferentes instrumentos a la vez de hacerme poner en posiciones incomodas después de cada tanda, para terminar con una inyección muy dolorosa inocua para mi organismo, pero que hacia parte del castigo. Ahora Carlos me tiene una sorpresa un médico y un enfermero mas una señora que se dedica a depilar.

Cuando tocaron la puerta me sobresalte, estaba totalmente desnuda y no sabía dónde estaba mi ropa, me avergonzaba que me vieran así, como Dios me trajo al mundo, además que con ciertos complejos sobre mi cuerpo que he aprendido a superar gracias a Carlos, pero con otra persona, era diferente.

Carlos salió abrir la puerta y le pregunte… Donde esta mi ropa, a lo que contesto ya te dije que la guarde, no la necesitas, y pero la remera respondí yo, agarra cualquiera de las mías que están en el placard y si no quédate así, créeme esta señora ha visto muchas nenas desnudas… nooo grite yo.

Busque rápidamente pero no veía ninguna me empecé a desesperar, un nudo se hizo en mi garganta y cuando me había resignado a que esta desconocida me viera desnuda, encontré la remera del pijama de Carlos y me lo puse encima, era largo así que por lo menos me cubría hasta un poco más abajo de la cadera.

Mary ven aquí, me llamo Carlos, Salí muy roja de la habitación y me encontré con una señora ya madura, le calculo entre 55 y 60 años de edad alta 1.73 mts tal vez, robusta, su cabello totalmente blanco y con toques purpura, ojos azules profundos y algo intimidantes de piel morena, con unas pocas arrugas. Inspiraba respeto y autoridad, vestida con su uniforme blanco con azul marino.

Te presento a la Sra. Romina, ella es la persona que te va a depilar, es de mi entera confianza, no tengas ninguna vergüenza con ella. Sonreí y le extendí mi mano como señal para saludarla a lo cual me saludo de beso, diciendo aquí en Argentina se saluda asi, o fue que ya se te olvido. Su tono fue tan autoritario que simplemente la salude de beso y le dije si discúlpeme, ya no estaba acostumbrada a saludarme de beso con personas que no conozco.

No hay problema me respondió ella, así que tu eres la nenita de Carlos que necesita una depilación verdad? Ya sabes que las nenitas no tienen ningún pelito, además se ve feo, así que yo te voy a depilar totalmente donde lo necesites, usare cera de miel de abejas, porque Carlos me dijo que tienes la piel muy sensible.  No te preocupes te lo hare con delicadeza para que no te duela tanto, y tu te portaras bien, quietita y calladita mientras hago el procedimiento. Mire a Carlos buscando consuelo y protección, con lo cual el me guiño el ojo, me beso en la frente y me dijo no te preocupes princesa, solo será un momentito y quedaras como a papi le gusta.

Donde podemos hacer la depilación Carlos? Pregunto Romina aquí en esta habitación le contesto Carlos era la misma donde me había castigado y había una camilla. Mientras ustedes hacen lo suyo yo voy a ver un ratito televisión un partido de futbol que están dando.

Romina se dispuso a sacar todos sus instrumentos de trabajo, me indico que me acostara boca arriba en la camilla. Que me quitara la remera, a lo cual le pregunte si era absolutamente necesario y contesto que no, que me la quitara después de que terminara de cintura para abajo.

Estando en la camilla y ya con la cera lista, indico que abriera las piernas para empezar la depilación, y comenzó era un poco doloroso pero aguantable, cuando llego a los labios, esto si que me dolía y unas cuantas lagrimas cayeron por mi rostro.

Tranquila y respira me decía Romina, esto va a ser rápido, tienes que depilarte más seguido, ya sabes las nenas como tú, no tienen pelos en ninguna parte del cuerpo. Y las nenas deben ser obedientes, sumisas y buenas. Así que si te duele te aguantas porque lo haces porque es una orden de tu Papi.

Al escuchar esto me quede muda, sabía que Carlos le había contado, me sentí indefensa y cada vez que halaba esa tela con la cera mas lagrimas caían, después de lo que pareció un siglo me puso un poco de talco sobre la piel para aliviar la sensibilidad, y continuo con las piernas, cosa que no me dolió mucho. Cuando termino con la parte de adelante. Me dijo ahora date la vuelta.

Sentí enrojecer y mi cara despedía calor, aun tenia las nalgas rojas y esta señora sabia de las practicas con mi novio, no tuve más remedio sino darme la vuelta y justo cuando me vio, me dijo has sido una nenita desobediente y ya te castigaron. Pero Carlos fue bueno, conmigo tendrías varias marquitas en ese culo tan bonito que tienes. A lo cual lo único que atine a contestarle fue, eso es un acuerdo entre los dos nada de marcas ni temporales o permanentes de ningún tipo.

En seguida me pido que levantara la cadera y me separara las nalgas, con lo cual la depilación en esa zona fue rápida e indolora, me depilo las nalgas y la parte de atrás de las piernas.

Después de que termino con toda la zona de cintura para abajo me pidió que me quitara la remera para depilar los pocos vellos en la zona axilar, y las manos. Cuando me retire la remera me la puse tapando la zona genital a lo cual Romina hizo un gesto de disgusto pero la dejo ahí.

Finalmente término y cobro por su servicio, aliviada porque había terminado tan humillante suplicio, me puse la remera y fui a ver a Carlos quien estaba apagando el tv, porque el partido había terminado.

Al verme me dijo bueno quítate la remera, se termino el descanso y déjame examinarte a ver como quedaste… ummm me gusta, te ves preciosa así, eres la nena de Papi. Le dije: Yo quiero hablar contigo acerca de… delicadamente sus dedos se posaron sobre mi boca y me dijo cuando termine la jornada hablaremos.

Ahora ayúdame a limpiar la cocina, prepara un café, después prepara el almuerzo algo simple, se que no cocinas mucho, y después vas a barrer la habitación donde te castigue porque será el consultorio. Tengo una sorpresa muy linda para ti, para cuando venga el médico y el enfermero.

Totalmente desnuda y con un delantal me dispuse a limpiar la cocina con esmero me imagine viviendo con Carlos y que esto fuera una rutina casi diaria, y la verdad me excito un poco. Después hice el café que me pidió para recordar viejos tiempos y luego puse hacer algo muy sencillo para el almuerzo. Una carne asada con papas fritas. Cuando estuvo todo eso, barrí y arregle el lugar para la singular visita. Una vez terminado me senté a almorzar en bolas con Carlos, esperando su próxima instrucción.

Continuara…?