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viernes, 5 de diciembre de 2014

CRONICA DE UNA INYECCION ANUNCIADA ...5 (RELATO)


Para comenzar  a leer la historia haga click aqui: http://chicadesobediente.blogspot.com/2014/11/cronica-de-una-inyeccion-anunciada.html



CAPITULO 5





Nuevamente el trinar de los pájaros, me despertaron, pero no me sentía nada bien, escalofríos en todo el cuerpo, si me arropaba sentía mucho calor, y si me desarropaba mucho frio, la garganta me dolía horrible, que no podía ni hablar.

Sabía que en minutos entraría Andres para la inyección de la mañana, y sentía tan adolorido el trasero que solo conseguía dormir bocabajo, y ese día tocaba además la vitamina. Pero realmente estaba tan mal que no quería ni protestar, de pronto tuve miedo mucho miedo, porque podría suceder que mi internaran en un hospital, yo sola en Argentina sin nadie que estuviera conmigo además de Andres, que tenía que trabajar.. empecé a llorar en silencio, profundamente triste y angustiada.

Escuche que la puerta se abrió, y vi que era él, medio dormido, con cara de cansado, con la bandejita y todo en ella para hacer su labor de enfermero.

Al verme llorar y mi cara totalmente descompuesta llena de lagrimas, se preocupo e inmediatamente dejo lo que traía en la mesita de luz, se acerco a mí y con vos visiblemente preocupada

-Que tienes princesa? Que te duele? Te sientes bien?
-No, no me siento bien con un hilito de voz mientras buscaba su cuello para abrazarlo
-Nena que pasa? Hoy estas sin voz, completamente disfonica… porque lloras pequeña? Mientras tocaba mi frente.
-No quiero que me internen respondí yo entre sollozos y con la poca voz que tenia.
-Ay amor, tranquilízate, tenes fiebre y bastante alta. Ya te tomo la temperatura y vamos a llamar a Daniel.
-No, no, por favor me va internar y no quiero, por favor no me dejes sola y abandonada en un hospital respondí yo en medio del llanto.
-Calmate, no va a pasar nada de eso. Primero te voy a tomar la temperatura, y vamos paso a paso
- Por favor no me dejes sola, no me vayas a internar, yo te prometo que te ayudo en casa, y que no vuelvo a protestar.
-Mi amor, estas con mucha fiebre tranquila no llores, que me hace mal verte llorar, no pienses boludeces.

En seguida me acomodo en su regazo, mientras yo lo abrazaba fuertemente llorando en su hombro,  el me abrazaba con fuerza, acariciaba mi espalda, y daba unos chirlitos muy suaves en mi trasero, tratando de tranquilizarme diciendo que todo iba a estar bien, que no me iba abandonar.

Después de 15 minutos, me dijo a ver nena, vamos a tomar tu temperatura, estas ardiendo en fiebre y así no te puedo inyectar. Me acomodo en la cama bocabajo y bajo el pantalón junto con la ropa interior hasta las rodillas.

Saco la vaselina y el termómetro, después de lubricarlo, mientras que con su mano derecha separaba las nalgas, dejando expuesto mi hoyito, introdujo lentamente el termómetro, se levanto y salió de la habitación mientras pasaban los 5 minutos estándar para medir la temperatura.

Al regresar se había puesto unos short deportivos y una remera, y procedió a retirar el termómetro que marcaba 39.7, dijo estas volando en fiebre pequeña, te voy a dar un baño de agua tibia para bajar la fiebre, después va el supositorio. Y luego llamamos a Daniel
Subió el pantalón y la ropa interior, me ayudo a levantar de la cama y tomada de la mano me llevo al baño, estando allí me desnudo completamente retirando la blusa dejando los pechos al aire, y posteriormente el pantalón y por último la bombacha.

Era una sensación tan extraña donde el me desnudaba, sentí vergüenza, ya nos habíamos visto desnudos, pero esta vez era diferente, sus ojos recorrían mi cuerpo, y el vestido me hizo sentir pequeña, que estaba a su merced, esta sensación duro segundos porque abrió el agua del grifo, y cuando estuvo tibia me metió allí.

Suavemente me dio un baño con un gel de lavanda desestresante, masajeando el cuello, los pechos, los glúteos, la vagina y uno que otro dedo se le escapo a lugares indebidos. Luego el enjuague sin tocar mi cabeza porque estando en ese estado era contraproducente lavarme el cabello.

Después de minutos, cerró el grifo y me arropo con una toalla color azul claro, esponjosa y suave que envolvía todo mi cuerpo, me seco todos los rincones y cuando estuvo lista me levanto en sus brazos y me llevo a la cama.

Estando desnuda puso dos cojines sobre la cama y me indico que pusiera mi cadera sobre estos, dejando mi cola en pompa, totalmente ofrecida, se puso un guante de látex y abriendo las nalgas para dejar mi ano expuesto, delicadamente fue metiendo el supositorio acompañado por un dedo y dejándolo un rato allí para que no expulsara el supositorio.

Dentro de mi malestar, me gustaba lo que hacía, eran sensaciones mezcladas que no había sentido nunca, incluso algo excitada de la manera como me tocaba y acariciaba.

Luego me dio una bombacha limpia y la pijama, me ayudo a vestir y delante mío le marco a Daniel, le comento como estaba yo, que había amanecido bastante mal, y después se salió de la habitación para hablar en privado con el, dejándome en un estado de ansiedad total.

Minutos después que para mi fueron eternos, entro serio a la habitación, se sento en la cama y dijo

-Nena, hable con Daniel de tu estado de salud
-Me vas a internar verdad, esto con la voz quebrada y los ojos llorosos
-No linda, todavía no, por favor tranquilízate
-Entonces porque estas tan serio
-Mira pequeña, Daniel me dijo que tal vez tuviste una recaída por no cuidarte lo suficiente y que el antibiótico no este funcionando
-Pero yo si me he cuidado, le reproche, eso fue por andar medio desnuda anoche en la casa … la culpa es tuya y ahora la que sufre las consecuencias soy yo, totalmente enojada le respondi
-Mary no me contestes así, y déjame terminar.
-Pero, pero es que…
-Nada de peros, silencio y escucha lo que tengo que decirte.

Mira linda, tal vez el paseíto de anoche te pudo afectar un poco, lo que pasa es que Daniel está preocupado por la fiebre de esta mañana, significa infección que está batallando tu cuerpo, lo que quiere decir que a pesar de llevar 3 antibióticos encima pinchados no está haciendo efecto. Así que el viene como a las 10 de la mañana a revisarte y tal vez deba cambiar el tratamiento por algo mas fuerte y efectivo.
Lo mire muda, no creía lo que estaba escuchando a que se refería con más fuerte y efectivo? Interpreto mi mirada, y me dijo por favor no te angusties desde ya, por ahora voy a tomarte nuevamente la temperatura, y si sigue alta tengo que conseguir una inyección de Metamizol, para que haga refuerzo con el supositorio, además que es muy alta.

Seguía muda, solo lo miraba y con la cabeza a mil revoluciones por hora, baje la cabeza y casi que inaudible le dije que no quería que me pinchara mas, solo me miro y dijo señorita adopte la posición.

Me di la vuelta y procedió a tomarme la temperatura como a él le gusta y a mí también sobra decirlo, había bajado pero solo a 39. Moviendo su cabeza de lado a lado en señal de desaprobación, ni modo nena, tengo que pincharte esa Metamizol, pero no te preocupes es pequeñita y casi no duele. Voy a llamar a la farmacia y diciendo esto se retiro de la habitación.

Me recosté nuevamente, sintiéndome mal, pero lo que mas me carcomía la cabeza era la posibilidad de hospitalización.

Al ratito entro Andres, con un paño y un tazón de agua, se sento a mi lado y lo puso en mi frente, haciéndome mimitos y  diciéndome cosas dulces al oído.

Llego el de la farmacia con la inyección, Andres me la aplico y la verdad casi ni dolio, dijo sabes no voy a ir a la oficina, me quedo aquí contigo porque hoy estas muy malita, y sensible pequeña. Hazte a un lado, - Te vas a contagiar, le dije a el moviéndome hacia el lado derecho de la cama, -no importa asumo el riesgo contesto.

Nos quedamos dormidos cuando Lorena golpeo en la puerta avisando que el Dr. Schwartz había llegado, a lo que Andres le dijo, decile que siga y lo traes a esta habitación.

Entro Daniel con su bata blanca y con el maletín de medico característico al verlo sentía mariposas en el estomago, una ansiedad increíble, además de lo serio, nunca había visto a Daniel tan serio. Me reviso nuevamente en ropa interior, puso mucho cuidado a mis pulmones, reviso mi garganta y así siguió hasta que termino.

Cuando me miro movió su cabeza de lado a lado saco su libreta para las recetas, tuve miedo y pánico y solo le dije por favor no me mandes internar…

Solo dijo Mary date la vuelta te voy a inyectar este antibiótico es un poco más fuerte que el anterior, y tengo que subirte la dosis a cada 6 horas, tenemos que atacar esta infección porque está haciendo estragos en tus pulmones, si no estás bien dentro de 3 días, te vas derechito al hospital.

En ese momento se dirigió a Andres y le comento, estas inyecciones hay que aplicarlas de manera profunda en el musculo, son dolorosas, y deben ser aplicadas exactamente a las 6 horas, no se puede pasar a lo Max 10 minutos. Además voy a recetarte tres inyecciones de vitamina C, que deben aplicarse cada semana.

Al momento Andres se sentó en una silla, y dijo Nena, veni aquí, lo mire e hice un movimiento de la cabeza indicándole que no me quería mover. Ante lo cual solo dijo AHORA, para ya!. Se levanto de la silla y tomándome de la mano, en susurro en mi oído sentencio: no pretenderás que te castigue delante de Daniel verdad?

La sangre se me enfrió y ya me levante y fui despacio hasta él, no me había percatado que Daniel había estado preparando la inyección y solo sentí el olor tan penetrante del alcohol, al acércame a Andres, me hizo la seña de hacerme en sus rodillas antes había puesto un cojín en su regazo, de esta manera dejaba mi trasero en pompa, ofrecido como decía el.

Daniel con una voz grave dijo esto ya está, en ese momento Andres de un movimiento bajo la ropa de la pijama junto con la ropa interior, quede con el culo al aire, y solo sentí como Andres aprisiono mis piernas colocando una de sus piernas encima.

El algodón paso por mi piel, poniendo mi piel de gallina y zaas el pinchazo el cual sentí ya tenia el musculo muy adolorido, y luego empezó a inyectar con un ritmo constante, lloraba, me quejaba, suplicaba que no mas.

Me sorprendió que Daniel me diera una palmada en la otra nalga no tan fuerte diciendo, no te quejes tanto, si tu misma te lo buscaste.. lo recuerdas?

Al fin termino de inyectar, me sobo y luego Andres me dejo un ratito con la cola al aire mientras masajeaba la zona y hablaba con Daniel totalmente ignorándome. Finalmente me acomodo la ropa, y me llevo a la cama poniéndome bocabajo.

Daniel entrego la sentencia, digo la receta de la nueva medicación, salió a hablar con Andres fuera de la habitación y me dejaron allí.

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